La iglesia es una comunidad de fe, esperanza y caridad, expresadas en una vida de oración y de entrega. Es el reflejo de la vida de un Dios Amor. Pero la Iglesia somos cada uno de los que formamos parte de ella. El futuro de cada uno estriba en la capacidad de ser y sentirse iglesia de una manera responsable. La iglesia es la familia de los hijos de Dios que camina hacia la casa paterna.