Los poemas Tiriel y El libro de Thel conforman el punto de arranque de la poesía visionaria de William Blake (1757-1827) y son, por lo tanto, una puerta idónea para ingresar en el imponente edificio de su arte maduro. Compuestas en torno a 1789, poco antes del traslado de su autor al barrio londinense de Lambeth, donde culminaría la primera gran etapa de su vida creadora, se trata de piezas contemporáneas en el tiempo de las famosas Canciones de Inocencia (también de 1789) y El Matrimonio del Cielo y el Infierno, libro terminado un año más tarde. Hallamos en ellas, bien es verdad que en germen y a una escala más accesible para el lector no familiarizado, muchos de los elementos formales y temáticos que definen su obra posterior: por un lado, el empleo del «septenary» o heptasílabo (un verso de siete pies tónicos), que permite fusionar el ritmo de la poesía popular con el flujo inclusivo y desbordante del versículo; por otro, la creación de una mitología privada y sincrética en la que hallan cabida referencias de las más diversas tradiciones, en un doble intento de darles nueva vida y expresar una cosmovisión que, si bien resulta innegablemente personal, hunde sus raíces en los movimientos de «disidencia» («dissenting tradition») del protestantismo inglés.
Ficha técnica
Editorial: Artemisa Ediciones
ISBN: 9788496374393
Idioma: Castellano
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 14/03/2006
Año de edición: 2006
Plaza de edición: Madrid
Especificaciones del producto
Escrito por William Blake
Nació el 28 de noviembre de 1757 en Londres. Se matriculó en una escuela de grabado y con 14 años, trabaja como aprendiz del grabador James Basire. Posteriormente estudió en la Royal Academy. En 1784 abrió una imprenta y aunque fracasó, al cabo de unos años, continuó ganándose la vida como grabador e ilustrador. Se inició en la escritura con tan sólo 12 años. Considerado prerromántico, su obra gráfica desafiaba las convenciones artísticas del siglo XVIII. Resulta evidente la influencia de Miguel Ángel en algunas de sus figuras. En 1800 se trasladó a la ciudad costera de Felpham, donde vivió y trabajó bajo el patrocinio de William Hayley. Falleció en Londres el 12 de agosto de 1827.