Este ensayo recorre cien años en los que la música se convirtió en un arte capaz de expresar significado y se reivindicó como un medio ideal para la (re)creación de obras literarias, poesías y modos de pensamiento. Desde un angulo tan amplio, tan simbolico, es desde el que se analizan distintos compositores y obras a fin de desvelar la relacion entre musica y palabra, entre musica y significado, conceptos que habitan en sus pentagramas. La seleccion de los protagonistas ha venido condicionada por su vinculo con la corriente de pensamiento denominada idealismo, que vertebro la filosofia germanica en la primera mitad del siglo XIX y convirtio a la musica en el arte por excelencia, elevandola a la condicion de filosofia para conectar con aquello mas alla de lo material.