En cuarenta y nueve capítulos, breves y densos, Jacques Castermane reflexiona sobre un zen para Occidente, desembarazado de los ritos asiáticos: una vía de acción y de meditación laica, en medio de lo cotidiano. Traza un camino de experiencia y de ejercitacion que nos conduce a una nueva cultura del silencio y a la sencillez necesaria en un mundo cada vez mas complicado y ruidoso. Nos lleva al conocimiento del modo de funcionar de nuestro propio espiritu y responde al deseo de cambiarse a uno mismo. Estos capitulos, llenos de sentido comun y de lucidez, son una guia para comprender mejor el sentido de nuestra vida. Nuestro estado de salud fundamental reside en la calma interior, nos dice el autor. Su libro pacifica el alma, devolviendole una nueva confianza en la existencia. JACQUES CASTERMANE siguio durante mas de veinte años (1967-1988) las enseñanzas del sabio de la Selva Negra, Karlfried Graf Durckheim. Desde 1981 anima una escuela de meditacion en la Drome (Francia): el Centro Durckheim. Ediciones Mensajero ha publicado su obra La alegria de ser, un libro que propone como camino hacia la sabiduria no el del discurso filosofico sino el del ejercicio espiritual: la via de la tecnica, algo muy conocido en Oriente y bien singular en Occidente.
En cuarenta y nueve capítulos, breves y densos, Jacques Castermane reflexiona sobre un zen para Occidente, desembarazado de los ritos asiáticos: una vía de acción y de meditación laica, en medio de lo cotidiano. Traza un camino de experiencia y de ejercitacion que nos conduce a una nueva cultura del silencio y a la sencillez necesaria en un mundo cada vez mas complicado y ruidoso. Nos lleva al conocimiento del modo de funcionar de nuestro propio espiritu y responde al deseo de cambiarse a uno mismo. Estos capitulos, llenos de sentido comun y de lucidez, son una guia para comprender mejor el sentido de nuestra vida. Nuestro estado de salud fundamental reside en la calma interior, nos dice el autor. Su libro pacifica el alma, devolviendole una nueva confianza en la existencia.
La sabiduría no hace las veces de la filosofía; ni la filosofía las veces de la sabiduría: tenemos necesidad de ambas, y de la diferencia entre las dos.
Eso es lo que justifica y da valor a este lib