Siguiendo la gran tradición de los Padres de la Iglesia, este libro invita a escuchar la Palabra de Dios ligándola a la vida diaria, para que cada uno convierta su corazón a Dios y no viva sólo para sí. La exhortación evangélica a rezar siempre, sin cansarse, se hace así realidad también para quien vive en los ritmos difíciles de la sociedad actual. Vincenso Paglia sigue el año litúrgico -ciclo A- todos los domingos, las fiestas y los tiempos fuertes (Adviento, Navidad, Cuaresma y Pascua), aprovechando el resto de los días para leer y comentar de forma continuada los profetas menores (Oseas, Joel, Amós, Jonás, Miqueas, Nahum, Habacuc, Sofonías, Ageo, Zacarías), cartas de Pablo (Romanos, Gálatas, Efesios, Filipenses, Colosenses, Tesalonicenses, Timoteo, Tito, Filemón) y la Carta a los hebreos. Quien es fiel a este encuentro cotidiano con la Palabra, experimentará aquello que Jesús dice a la samaritana: "El que beba del agua que yo quiero darle, nunca más volverá a tener sed. Porque el agua que yo quiero darle se convertirá en su interior en un manantial del que surge la vida eterna"; y con ella repetirá: "Señor, dame esa agua; así ya no tendré más sed" (Jn 4, 14-15)
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